NO JUSTIFICO NADA NI A NADIE, pero, pensar que la aplicación de la pena de muerte es la solución a una problemática generada por la actual coyuntura social de exclusión, me parece que es una estupidez tan grande como pensar que al aplicarla a quien no tiene empleo y debe robar o matar para comer, debe ser ajusticiado por el delito cometido.
La pena de muerte debe ser aplicada a quienes niegan la oportunidad de vivir dignamente a su prójimo al ser funcionari@ corrupt@, al pagar salarios miserables, a quien autoriza una salario mínimo inferior al valor de la canasta básica, a quien ejerce la profesión de maestro solamente por el sueldo y no por vocación, a quien predica la creencia en un Dios que odia a sus hijos por profesar otra fe o amar a alguien de su mismo sexo biológico, y un larguísimo etcétera.
La pena de muerte debe ser aplicada a quien orilla a su prójimo a tener necesidad en un país de abundancia.
Jolie Totò Ryzanek Voldan
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