Un final "de película" (20020718)

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ORIFICIO

Un final “de película”

(Hispano Times Año 1, No. 5, Pág. 7)

Jolie Totò Ryzanek Voldan *

Inicialmente, EE.UU. nunca ha sido presidido por una persona de ascendencia afro americana, ni por una mujer…, en cualquiera de los casos resulta más que obvio un análisis, de la coyuntura que pudiera darse, ya que todo apunta a que estamos a las puertas de un verdadero “final de película” de cuando menos uno de los tabúes norteamericanos que “pasará a ser historia” al final de las próximas elecciones, luego del desastre republicano de la administración presidida por George Watson Bush y “la locura” de todo un pueblo que finalmente nadie entiende, al intentar analizar su patrón de conducta colectiva.

Todo apunta a que los republicanos perderán (al igual que ya sucedió con el Senado) la Presidencia del país más poderoso (en términos militares) del mundo.

Dicho lo anterior, y para efectos de análisis, me permito citar algunos indicadores que cualquiera “con dos dedos de frente” (“una mediana inteligencia”) pueda tomar como referentes, para intentar analizar las causas del actual estado de cosas en el país del norte:

·         La administración demócrata del presidente William (Bill) Clinton, heredó una economía sólida, con indicadores macroeconómicos excelentes, una inflación controlada y moderada y un SUPERÁVIT realmente envidiable, con todo lo cual EE.UU. poseía una productividad ASCENDENTE y una MONEDA SÓLIDA que a su vez “obligaba” a todas las economías mundiales a hacer serios esfuerzos para “mantener el paso” que marcaba el hasta entonces líder económico mundial.

·         En “una lección de alternancia en el poder”, resulta electo (casualmente con los votos del Estado donde el hermano era Gobernador) como Presidente un personaje, cuyo único referente consistía en ser Gobernador, e hijo de un ex presidente norteamericano (con nombre homónimo, casualmente).

·         Como era de esperar, se investiga “al desconocido en la palestra mundial” y se publica un libro al respecto (que dicho sea de paso, contiene muchos hechos y situaciones verdaderamente vergonzantes y espeluznantes) que a cualquier gerente -ya no digamos el Presidente norteamericano- le costaría el puesto.

·         El “nuevo” Presidente, le resta importancia -y el pueblo estadounidense también (¿?)- y adopta una “política de endurecimiento” que traslada de manera obcecada al ámbito mundial y… ¡EE.UU. es atacado!, en respuesta por los agredidos políticamente. Con lo cual, ¡lanza al mundo a una guerra sin fin!, ya que como dijo José Martí: “Podréis matarme, pero a las ideas, no”, o Ernesto “Che” Guevara: “Prefiero morir luchando que vivir arrodillado”.

·         Curiosamente, ¡es reelecto! (aquí es donde nadie entiende a los estadounidenses) y continúa sin amilanarse en “sus políticas de endurecimiento”, cuyos amargos frutos sufre el mundo, guerra, precios estratosféricos del crudo del petróleo y, un DÉFICIT RÉCORD en su economía, mismos que a su vez conducen a su país a una baja ostensible de la productividad y, consecuentemente a la pérdida de valor del dólar ante otras monedas (euro, yuan y yen) y finalmente al descalabro de los principales indicadores macroeconómicos de su país, todo lo cual ha conducido a la PÉRDIDA DEL LIDERAZGO ECONÓMICO mundial, que por estar en una economía globalizada hace que las “economías emergentes” surjan como líderes.

·         “La guinda del pastel” la coloca (el mismo George Watson Bush) cuando en un intento desesperado hace “una gira por países de su traspatio” (Latinoamérica) buscando apoyo para “sus políticas de endurecimiento”, luego de impulsar una ley en que sitúa en calidad de “delincuentes” ¡a los habitantes del traspatio que visita!, y hacer levantar un muro “para que no ingrese” más mano de obra barata a “su país” (¿?), incitando a sus compatriotas a una especie de “cacería” de personas que han emigrado a EE.UU. (arriesgando la vida misma) y que hacen todo aquello que sus mismos compatriotas ¡no hacen!, por la causa que sea.

Mientras todo esto sucede, sus adversarios electorales “capitalizan” casualmente (por no decir “por reducción al absurdo”, matemáticamente hablando) tanta “metida de pata” (“errores”) con el pueblo estadounidense y surgen dos líderes ¡una mujer y un afro americano!, con lo cual el mundo presenciará otra “lección de alternancia en el poder”, con el valor agregado de poseer al primer Presidente norteamericano mujer o de ascendencia afro americana… ¡no se pierda este final “de película”!

(*) Teóloga y Administradora de Pequeñas Empresas guatemalteca.