EDITORIAL
Capturada
finalmente
La lenta aplicación de la justicia en Guatemala,
finalmente rindió uno de los frutos que la mayoría de la población esperaba: la
captura de la ex vicepresidenta Roxana Baldetti Elías, quien se vio forzada a
renunciar a su cargo, luego de revelarse el actuar de la banda denominada “La
Línea”, que era liderada por su secretario privado, Juan Carlos Monzón, quien se
encuentra prófugo de la justicia.
La captura de una persona sindicada de la comisión de un
delito, no debiera de pasar de ser una noticia perteneciente a la sección de
sucesos policiales, pero en este caso, cobra relevancia por varias causas:
Inicialmente, porque ella siempre fue una mujer sumamente
prepotente a su paso por la esfera gubernamental: cuando llegó a la Vicepresidencia
fragmentó el Organismo Ejecutivo y varias instancias gubernamentales, al colocar
a sus allegados en diversos puestos, en desmedro de los propuestos por el
presidente, Pérez Molina.
Su captura era algo que la población esperaba saber con
especiales ansias, precisamente por ese alarde de prepotencia tan “normal” en
ella, por sus desplantes en cualquier lugar, ante cualquier situación y por su
desfachatez para “hacer lo que le venía en gana”.
Hace ya algunos días, se conoció que “la amiga” de Roxana
Baldetti conocida como “La Reina del Sur”, había aceptado ser colaboradora de
la justicia norteamericana, para reducir su condena en aquel país, y como
consecuencia de sus declaraciones en aquel país, las autoridades
estadounidenses estaban por solicitar la extradición de la hoy capturada hacia
aquel país para juzgarla, cuando menos como cómplice de la encartada. Teniendo
en cuenta que Baldetti se encontraba en libertad, las pesquisas se aceleraron
en Guatemala, para encontrar las evidencias necesarias para capturarla,
aportando pruebas científicas irrefutables de su participación en los hechos
delictivos que hoy se le imputan, y poder tenerla a buen resguardo, para cuando
llegue la solicitud de extradición del país norteamericano.
Lo que nadie esperaba fue que entre las diversas pruebas
científicas por el caso Baldetti, surgieron pruebas de la participación del
presidente, que irrefutablemente lo involucran en la comisión de otros delitos,
por lo que simultáneamente a la orden de captura contra la sindicada, ya se
presentó una nueva solicitud de antejuicio contra el encartado.
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